Cosecha tu siembra de acuerdo a la energía de la Luna.
La luna tiene el poder de macar nuestros ritmos y ciclos, tiene gran influencia en nuestra estabilidad emocional dirigiendo nuestras aguas internas, influyendo en once diferentes puntos en la mujer y uno en los hombres.
De acuerdo a la tradición, una de las actividades más propicias para trabajar en luna nueva es la de eliminar las malas hierbas, quitar las hojas marchitas. Entonces nosotros aprovechamos este tiempo para sacar fuera los malos hábitos, cortar de raíz lo que nos impide ser feliz, aquello que no debemos contener, ni nutrir, esas relacionas tóxicas de parejas, trabajos, familiares y situaciones cargadas de energía pesante en general.
Arrancamos nuestra piel vieja y preparamos el terreno para la próxima cosecha, lo aramos y abonamos de manera que al final de la jornada podamos acudir a nuestro interior, al vacío, al espacio oscuro, que nos permitirá entrar en quietud, donde podremos recargarnos de energía fina, de la más alta dimensión para comenzar de nuevo.
Optimizamos esta fase de siembra y observamos muy bien donde queremos echar raíces, desde donde me coloco y hacia dónde voy. La mujer aprovecha la ocasión para sembrar su luna u ofrendar con vino tinto, libero y entrego a Pacha Mama. Honrando el flujo de la energía, le pido que en Ayni me abra camino en mis proyectos, relaciones, salud y todo lo que sintamos es lo mejor para el viaje de nuestra alma. De esta forma experimento mi espiritualidad, pongo en práctica mi poder femenino y me conecto a los millones de hombres y mujeres en el mundo que honran a la abuelita luna.
Aho!
Milizen – www.taller1111.net